Conoce qué seguros de ahorros existen, así como sus diferencias.
Los seguros de ahorro son productos bancarios diseñados para que el beneficiario pueda recibir una cantidad de dinero en una fecha estipulada por ambas partes siempre y cuando éste continúe con vida al finalizar contrato. No obstante, existen diferentes tipos de seguros de ahorro según tus preferencias y metas. Te contamos cuáles son.
El primer tipo de seguros de ahorro a largo plazo garantiza al beneficiario una renta vitalicia en el caso de que este sobreviva al vencimiento del contrato pactado con la entidad. Entre las ventajas de los planes individuales de ahorro sistemático están su laxa tributación fiscal y que no es necesario realizar aportes de forma sistemática.
Los seguros Unit Linked tiene la ventaja de ser un producto mixto entre ahorro e inversión. De esta forma el beneficiario puede decidir en qué activos invertir (bonos, acciones…), teniendo una capacidad de gestión superior al de otras pólizas.
Al estar vinculados a fondos de inversión, la evolución y ganancias del mismo determinará el capital aportado al Seguro de Vida. Una parte del aporte anual se destina primordialmente al pago de la prima del seguro.
Los Planes de Previsión Asegurados son seguros de ahorro individuales a largo plazo que tienen un régimen jurídico y fiscal similar al de los planes de pensiones. De hecho, su principal objetivo es el de complementar los ahorros de jubilación del beneficiario.
Los PPA ya garantizan per se por cláusula contractual que el beneficiario recibirá un tipo de interés y un capital establecido al vencimiento de la garantía. También, al ser una póliza que se guía por la normativa de los planes y fondos de pensiones, asegura el desembolso en caso de fallecimiento, incapacidad laboral permanente u otros imprevistos fatales.
La principal diferencia entre un plan de pensiones y un PPA es que mientras el último ofrece rendimientos garantizados, el plan de pensiones no lo hace. La otra gran diferencia es que mientras en los planes de pensiones sí es posible realizar retiros anticipados, en los PPA solo puede llevarse a cabo ese derecho en el caso de situaciones excepcionales antes mencionadas.
El último de los seguros que vamos a analizar son los seguros de rentas vitalicias. Estos seguros son el producto vitalicio más adecuado en caso de que deseemos recibir una renta periódica durante los años que resten de vida del beneficiario.
El momento en el que el asegurado comience a recibir esas aportaciones depende del capital que aporte y de la rentabilidad que se obtenga durante la vida útil del seguro.
El capital de los aportes que recibirá el solicitante variará también según lo estipulado en el contrato y puede ser de forma mensual, trimestral o anual. La fiscalidad se muestra como una de las grandes ventajas de los seguros de rentas vitalicias, ya que este producto –al igual que otros similares- posee una fiscalidad especial exenta de tributación para las aportaciones.
Los SIALP –también conocidos como Plan de Ahorro 5- poseen la garantía de entrega de al menos el 85% de las aportaciones. Al igual que el ejemplo anterior de los seguros de rentas vitalicias, estas pólizas poseen un tratamiento fiscal favorable que se indican a la firma de su contrato.
En el caso de que el capital no supere los 5.000 € anuales con un plazo de al menos 5 años, su rescate estará exento de tributación.